I Reyes
El rey David era ya viejo y de edad muy avanzada; y por más que le cubrían con ropa, no podía entrar en calor.
Estando ya David cercano al día de su muerte, dio estas instrucciones a su hijo Salomón , diciendo:
Salomón , pues, afianzado que hubo su trono, emparentó con el faraón, rey de Egipto, desposándose con su hija; la que condujo a la ciudad de David, mientras que acababa de edificar su casa y el templo del Señor, y los muros alrededor de Jesusalén.
Reinaba, pues, Salomón sobre todo Israel.
Además de eso, Hiram, rey de Tiro, envió sus embajadores a Salomón , habiendo sabido que le habían ungido rey en el lugar de su padre; porque Hiram había sido siempre amigo de David.
Se comenzó a edificar la casa del Señor en el año cuatrocientos ochenta después de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, el año cuarto del reinado de Salomón sobre Israel, en el mes de Cío, esto es, el mes segundo.
Construyó después Salomón , y acabó enteramente en trece años, su propia casa.
Entonces se congregaron en Jerusalén todos los ancianos de Israel con los príncipes de las tribus y las cabezas de las familias de los hijos de Israel, al llamamiento del rey Salomón , para trasladar el arca del Testamento del Señor desde la ciudad de David, esto es, desde Sión.
Habiendo acabado Salomón de construir la casa o templo del Señor, y el palacio real, y todas las obras que había ideado y querido hacer,
También la reina de Saba, oída la fama de Salomón , vino en el nombre del Señor a hacer prueba de él con varias cuestiones oscuras.
Pero el rey Salomón amó apasionadamente muchas mujeres extranjeras; y especialmente a la hija del faraón, a las mujeres moabitas y amonitas, idumeas, sidonias y heteas,
Fue, pues, Roboam a Siquem, por haberse congregado allí todo el pueblo de Israel, para proclamarlo rey.
Mas he aquí que mientras Jeroboam estaba en el altar y echaba el incienso, llegó de Judá a Betel por orden del Señor un varón de Dios,
Por aquel tiempo enfermó Abía, hijo de Jeroboam.
En el año décimo octavo del reinado de Jeroboam, hijo de Nabat, en Israel, comenzó a reinar Abiam en Judá.
Después de esto habló el Señor a Jehú, hijo de Hanani, contra Baasa, diciendo:
Mas Elías de Tesbe, habitante de Galaad, dijo a Acab: Vive el Señor Dios de Israel, de quien yo soy siervo, que no ha de caer rocío ni lluvia en estos años, sino hasta que yo lo dijere.
Mucho tiempo después habló el Señor a Elías en el tercer año del hambre, diciendo: Anda y preséntate a Acab; porque quiero enviar lluvias a la tierra.
Contó Acab a Jezabel cuanto había hecho Elías, y cómo había pasado a cuchillo todos los profetas de Baal, sin dejar uno.
Después Benadad, rey de Siria, reunido todo su ejército, toda su caballería y carros armados, y teniendo consigo treinta y dos reyes, o pequeños príncipes, salió a campaña contra Samaria, y le puso sitio.
Después de estas cosas sucedió en aquel tiempo que Nabot, jezraelita, tenía en Jezrael una viña cerca del palacio de Acab, rey de Samaria.
Tres años se pasaron sin guerra entre la Siria e Israel;