Isaías, 45
[1] Esto dice el Señor a mi ungido Ciro, a quien he tomado de la mano, para sujetar a él las naciones y hacer volver las espaldas a los reyes, y para abrir delante de él las puertas, sin que ninguna pueda resistirle. •
Decreto divino que anuncia la entronización de Ciro, rey extranjero, dándole el título de Ungido. Este rey será instrumento de liberación para el pueblo de Dios, esclavizado en Babilonia.
[2] Yo iré delante de ti, y humillaré a los grandes de la tierra; despedazaré las puertas de bronce y romperé las barras o cerrojos de hierro. •
[3] Y te daré a ti los tesoros escondidos y las riquezas recónditas; para que sepas que yo soy el Señor, el Dios de Israel, que ya desde ahora te llamo por tu mismo nombre. •
Te elijo y destino para que ejecutes mis designios. Ex. 31, 2; 33, 17.
[4] Por amor de mi siervo Jacob , y de Israel mi escogido, te llamaré por tu nombre, te puse el sobrenombre de Ungido, y tú no me conociste. •
Y de Pastor y Salvador de mi pueblo.
[5] Yo el Señor, y no hay otro que yo; no hay dios fuera de mí. Yo te ceñí la espada, y tú no me has conocido; •
[6] y te armé, a fin de que sepan todos desde oriente a poniente, que no hay más Dios que yo. Yo el Señor y no hay otro.
[7] Yo que formo la luz, y creo las tinieblas; que hago la paz, y envío los castigos a los pueblos. Yo el Señor, yo que hago todas estas cosas. •
[8] ¡Oh cielos!, derramad desde arriba vuestro rocío; y lluevan las nubes al Justo, ábrase la tierra, y brote al Salvador , y nazca con él la justicia. Yo el Señor lo creé. •
La siguiente plegaria pide a Dios que de todos los acontecimientos terrenos saque la salvación. San Jerónimo traduce salvación y justicia, como nombres de persona Salvador y Justo.
[9] ¡Desdichado aquel que disputa contra su hacedor no siendo más que una vasija de tierra o arcilla de Samos! Acaso dirá el barro al alfarero: ¿Qué haces?, ¿no ves que tu labor no tiene la perfección del arte? •
[10] Ay del que dice a su padre: ¿Por qué me engendraste?, y a su madre: ¿Por qué me concebiste? •
[11] No obstante, esto dice el Señor, el Santo de Israel a los hombres que él formó: Preguntadme sobre las cosas venideras, demandadme sobre mis hijos, y sobre las obras de mis manos. •
[12] Pues yo hice la tierra y creé en ella al hombre; mis manos extendieron los cielos, y di mis órdenes a toda su milicia o celestial muchedumbre. •
[13] Yo soy también el que levantaré un varón para ejercer mi justicia, y dirigiré todos sus pasos; él reedificará mi ciudad, y dará libertad a mis hijos cautivos, sin rescate ni dádivas, dice el Señor Dios de los ejércitos. •
[14] Esto dice asimismo el Señor: Las labores de Egipto, y el tráfico o comercio de Etiopía, y los sabeos, hombres agigantados, se pasarán a ti y serán tuyos; caminarán en pos de ti yendo con esposas en las manos, y te adorarán, y te presentarán súplicas; en ti solamente está Dios, fuera del cual no hay otro dios. •
[15] Verdaderamente eres tú un Dios escondido o invisible, Dios de Israel, Salvador nuestro. •
Salvador es nombre propio del Dios de Israel. Sus acciones salvíficas van incluidas en las actividades humanas, aun en las mismas campañas del pagano Ciro. Sólo la fe permite reconocer la presencia de Dios y su acción.
[16] Confusos y avergonzados quedaron todos los forjadores de los errores o ídolos; a una han sido cubiertos de oprobio. •
[17] Israel, ha sido salvado por el Señor con salvación eterna: No seréis confundidos, ni tendréis de qué avergonzaros nunca jamás.
[18] Porque esto dice el Señor, creador de los cielos, el mismo Dios que formó y conserva la tierra; el que es su Hacedor, y que no en vano la creó, sino que la hizo para que fuera habitada: Yo el Señor y no hay otro que yo. •
[19] No he hablado en oculto en algún lugar tenebroso de la tierra; no dije al linaje de Jacob : Buscadme inútilmente. Yo el Señor que enseño la justicia y predico la rectitud. •
[20] Reuníos y venid, y acercaos todos vosotros que habéis salido salvos de entre las naciones; confesad que son unos necios los que levantan una estatua de madera que han tallado ellos mismos y dirigen sus plegarias a un dios que no los puede salvar. •
[21] Hablad con todos ellos, y venid, y consultad unos con otros: ¿Quién anunció desde el principio estas cosas? ¿Quién desde entonces las predijo ya? ¿Por ventura no soy yo el Señor? ¿Acaso hay otro dios que yo? Dios justo y que salve, no hay sino yo. •
[22] Convertíos pues, a mí, pueblos todos de la tierra, y seréis salvos; pues yo soy Dios, y no hay otro que lo sea.
[23] He jurado por mí mismo; ha salido de mi boca una palabra justísima y no será revocada; •
[24] es a saber: Ante mí se doblará toda rodilla, y por mi Nombre jurará toda lengua. •
Confesará a Dios. Eljuramento significa a veces en la Escritura el culto religioso de Dios, alabarlo, glorificarlo. Rm. 14, 11; Fp. 2, 10.
[25] Dirán, pues (atestiguándolo en el Señor, o con juramentos) que mía es la justicia y el imperio. Ante el Señor comparecerán y quedarán confundidos todos los que se le oponen. •
[26] Y entonces será justificada por el Señor, y glorificada o ensalzada toda la posteridad de Israel.