Salmos, 145
[1] Alaba al Señor, ¡oh alma mía! •
[2] Sí, alabaré al Señor toda mi vida; mientras yo exista, cantaré himnos a mi Dios. ¡Ah!, no queráis confiar en los poderosos de la tierra, •
[3] en hijos de hombres, los cuales no tienen en su mano la salud. •
[4] Saldrá su espíritu del cuerpo, y volverán a ser polvo; entonces se desvanecerán como humo todos sus proyectos. •
[5] Dichoso aquel que tiene por protector al Dios de Jacob , el que tiene puesta su esperanza en el Señor Dios suyo.
[6] Creador del cielo y de la tierra, del mar y de cuanto ellos contienen. •
[7] El cual mantiene eternamente la verdad de sus promesas, hace justicia a los que padecen agravios, da de comer a los hambrientos. El mismo Señor da libertad a los que están encadenados. •
[8] El Señor alumbra a los ciegos. El Señor levanta a los caídos; ama el Señor a todos los justos. •
[9] El Señor protege a los peregrinos; ampara al huérfano y a la viuda, y desbaratará los designios de los pecadores. •
[10] El Señor reinará eternamente; el Dios tuyo, ¡oh Sión!, reinará en todas las generaciones. •