Ezequiel, 38
[1] Me habló el Señor diciendo: •
[2] Hijo de hombre, dirige tu rostro contra Gog, a la tierra de Magog, al príncipe y cabeza de Mosoc y de Tubal, y profetiza sobre él, •
Gog representa los perseguidores del pueblo de Dios, y Magog sus secuaces.
[3] y le dirás: Esto dice el Señor Dios: Heme aquí contra ti, oh Gog, príncipe y cabeza de Mosoc y de Tubal: •
[4] Yo te llevaré por dondequiera, y pondré un freno en tus quijadas, y te sacaré fuera a ti y a todo tu ejército, caballos y jinetes, cubiertos todos de corazas; gentío inmenso, que empuñará lanzas, escudos y espadas. •
[5] Con ellos estarán los persas, los etíopes y los de la Libia, todos con sus escudos y cascos.
[6] Gomer y todas sus tropas, la familia de Togorma, los habitantes de lado del norte con todas sus fuerzas y muchos otros pueblos contigo se hallarán. •
[7] Aparéjate para resistirme, ponte en orden de batalla con toda tu muchedumbre agolpada alrededor tuyo, y dales tus órdenes.
[8] Pues al cabo de muchos días serás tú visitado y castigado; al fin de los años irás tú a una tierra, que fue librada de la espada, y cuya población ha sido recogida de entre muchas naciones en los montes de Israel, que estuvieron por mucho tiempo desiertos; esta gente ha sido sacada de entre las naciones, y morará toda en dicha tierra tranquilamente. •
[9] Tú irás allá y entrarás como una tempestad y como un nublado para cubrir la tierra con todos tus escuadrones, y con los muchos pueblos que están contigo.
[10] Esto dice el Señor Dios: En aquel día formarás en tu corazón altivos pensamientos, y maquinarás perversos designios;
[11] y dirás: Yo me dirigiré a una tierra indefensa; iré contra una nación que descansa y vive sin recelo alguno, y todos ellos habitan en lugares abiertos, sin puertas ni cerrojos;
[12] para enriquecerte de esta manera con los despojos y hacerte dueño de la presa, y descargarás la mano sobre aquellos que habían sido dispersados y fueron después restablecidos; sobre el pueblo que ha sido recogido de entre las naciones, el cual comenzó a poseer y habitar el país que se miraba como el centro de las naciones de la tierra. •
[13] Saba y Dedán, y los mercaderes de Tarsis, y todos sus leones te dirán: ¿Vienes tú acaso a recoger despojos? He aquí que has reunido tu gente para apoderarte de la presa, para pillar la plata y el oro, y hacer el saqueo de los muebles y alhajas y de riquezas sin cuento. •
[14] Por tanto profetiza, ¡oh hijo de hombre!, y dirás a Gog: Esto dice el Señor Dios: Pues, ¿no sabrás tú bien el día en que mi pueblo vivirá tranquilo y sin recelo alguno?
[15] Tú partirás de tu país de la parte del norte, llevando contigo muchas tropas, soldados todos de a caballo, que compondrán una gran muchedumbre, un poderoso ejército. •
[16] Y te dirigirás contra mi pueblo de Israel, a manera de nublado que cubre la tierra. En los postreros días vivirás tú y en ellos yo te conduciré a mi tierra; con el fin de que las naciones me conozcan, así que yo haré resaltar en ti, ¡oh Gog!, la santidad mía a la vista de ellas. •
[17] Esto dice el Señor Dios: Tú eres, pues, aquel de quien hablé yo antiguamente por medio de mis siervos los profetas de Israel, los cuales en aquellos tiempos profetizaron que yo te traería contra ellos. •
Dan 7; 8; 9.
[18] Y en aquel día, día en que llegue Gog a la tierra de Israel, dice el Señor Dios, se desahogará mi indignación y mi furor.
[19] Así lo decreto lleno de celo y encendido en cólera. Grande será en aquel día la conmoción en la tierra de Israel; •
[20] y a mi presencia se agitarán y andarán perturbados los peces del mar, y las aves del cielo, y las bestias del campo y todos los reptiles que se mueven sobre la tierra, y cuantos hombres moran en ella; y serán derribados los montes, y caerán los vallados o baluartes e irán por el suelo todas las murallas. •
[21] Y llamaré contra él en todos mis montes la espada, dice el Señor Dios, cada uno dirigirá la espada contra su propio hermano. •
[22] Y lo castigaré con la peste, y con la espada, y con furiosos aguaceros y terribles piedras; fuego y azufre lloveré sobre él, y sobre su ejército, y sobre los muchos pueblos que van con él. •
[23] Con esto haré que se vea mi grandeza y mi santidad, y me haré conocer de muchas naciones, y sabrán que yo soy el Señor.