Numeros, 10
[1] Y habló el Señor a Moisés diciendo:
[2] Hazte dos trompetas de plata batida a martillo con las que puedas avisar al pueblo cuando se ha de levantar el campamento. •
[3] Y cuando hicieres sonar las trompetas se congregará cerca de ti toda la gente a la puerta del Tabernáculo de la alianza.
[4] Si tocares una sola vez, acudirán a ti los príncipes y las cabezas del pueblo de Israel. •
[5] Pero si el sonido fuese más prolijo y quebrado, los que están a la parte oriental moverán los primeros el campo. •
[6] Al segundo toque semejante y sonido recio de la trompeta, recogerán las tiendas los que habitan al mediodía, y lo mismo harán los demás sonando reciamente las trompetas para la marcha. •
[7] Cuando se haya de congregar el pueblo, el sonido de las trompetas será sencillo y sin redoble. •
[8] Tocarán las trompetas los sacerdotes hijos de Aarón, y éste será un estatuto perpetuo en vuestras generaciones. •
[9] Si saliereis de vuestra tierra a pelear contra los enemigos que os muevan guerra, tocaréis con redoble las trompetas; y el Señor Dios vuestro se acordará de vosotros para libraros de las manos de vuestros enemigos. •
[10] Cuando hubiereis de celebrar un banquete, y días de fiesta, y las calendas o primer día del mes, tocaréis las trompetas al ofrecer los holocaustos y víctimas pacíficas, para que vuestro Dios se acuerde de vosotros. Yo el Señor Dios vuestro. •
[11] El año segundo, en el segundo mes, a los veinte del mes, se alzó la nube de sobre el Tabernáculo de la alianza; •
[12] y los hijos de Israel, divididos en sus escuadrones, partieron del desierto de Sinaí , y la nube vino a posar en el desierto de Farán.
[13] Los hijos de Judá, divididos según sus escuadrones, se pusieron en marcha los primeros, conforme a la orden del Señor, comunicada por Moisés;
[14] era el príncipe o caudillo de ellos Nahasón, hijo de Aminadab. •
[15] En la tribu de los hijos de Isacar fue el príncipe Natanael, hijo de Suar.
[16] En la tribu de Zabulón, fue el príncipe Eliab, hijo de Helón.
[17] Y desarmado el Tabernáculo, cargaron con él los hijos de Gersón y de Merari; y siguieron la marcha. •
[18] Partieron después por su orden los hijos de Rubén, divididos en sus compañías, cuyo príncipe era Elisur, hijo de Sedeur.
[19] En la tribu de los hijos de Simeón el príncipe era Salamiel, hijo de Surisaddai.
[20] En la tribu de Gad era el príncipe Eliasaf, hijo de Duel.
[21] Tras éstos caminaron los caatitas, llevando en hombros las cosas santas; y el Tabernáculo era llevado hasta el sitio donde se debía erigir. •
[22] Movieron asimismo su campamento los hijos de Efraín divididos en sus compañías, y de cuyo cuerpo era príncipe Elisama, hijo de Ammiud.
[23] En la tribu de los hijos de Manasés, el príncipe era Gamaliel, hijo de Fadasur.
[24] Y en la tribu de Benjamín era caudillo Abidán, hijo de Gedeón.
[25] Los últimos que partieron del campamento fueron los hijos de Dan, divididos por sus escuadrones, en cuyo cuerpo el príncipe era Ahiezer, hijo de Ammisaddai.
[26] En la tribu de los hijos de Aser era príncipe Fegiel, hijo de Ocrán.
[27] Y en la tribu de los hijos de Neftalí era príncipe Ahira, hijo de Enán.
[28] Este es el orden de los campamentos y la manera con que debían marchar los hijos de Israel por sus escuadrones, cuando levantaban el campo. •
[29] Dijo entonces Moisés a Hobab, hijo de Raguel madianita, su pariente: Nosotros partimos para el país cuyo dominio nos ha de dar el Señor; ven con nosotros para que te hagamos bien, estableciéndote ventajosamente; pues el Señor ha prometido bienes a Israel. •
[30] Hobab le respondió: No iré contigo, sino que me volveré a mi tierra donde nací.
[31] Pero Moisés: No quieras, dijo, abandonarnos, ya que tú eres práctico de los sitios en que debemos acampar por el desierto, y nos servirás de guía. •
[32] Y si vinieres con nosotros, te daremos lo mejor de las riquezas que nos ha de dar el Señor.
[33] Partieron, pues, del monte del Señor, caminando tres días, y el arca de la alianza del Señor los precedía, señalándoles aquellos tres días el lugar del campamento. •
El centro era el lugar señalado por Dios para el arca, en las marchas y en los campamentos.
[34] La nube del Señor iba también sobre ellos de día, durante el viaje.
[35] Y al tiempo de alzar el arca , decía Moisés: Levántate, Señor, y sean disipados tus enemigos, y huyan de tu presencia los que te aborrecen. •
[36] Mas al asentarla, decía: Vuélvete, oh Señor, hacia la multitud del ejército de Israel. •